Percy Colque: ‘Hoy por hoy juego por hobby’

Percy Colque tiene muchos gratos recuerdos de su paso por el fútbol boliviano, pero sobre todo dos: uno, cuando de The Strongest saltó al Tigres mexicano gracias a su notable momento futbolístico; y el otro, con Bolívar, cuando fue subcampeón de la Copa Sudamericana de fútbol.

En 2011 jugó por última vez en un equipo nacional y desde entonces poco o nada se ha sabido de él. Se fue a Francia y de ahí a Suiza, donde actualmente radica con su familia.

Desde hace unos días está de regreso en el país, aunque sólo temporalmente. Vino a ver a su madre y sus hermanos, y a visitar la tumba de su padre. De paso aprovecha para saber cuándo atigrados y celestes terminarán de pagarle viejas deudas.

“Hoy por hoy juego por hobby, es que no quiero dejar aún el fútbol. En Suiza estoy en el Meyran Fútbol Club, que es un equipo de Tercera División. Junto con mi familia, mi esposa Domitelle y mi hijo Mateus, nos fuimos a este país donde de alguna manera sigo la práctica activa”.

En su época fue un notable lateral izquierdo. De gran despliegue físico. De una gambeta efectiva. Se “comía” la cancha por su banda, subía y bajaba. Todo eso también lo llevó a jugar en la selección nacional.

Desde que en 1995 debutó en The Strongest —donde jugó en varios periodos—, también actuó en Bolívar, San José y Real Potosí. En México estuvo en Tigres y en Albania en el Tirana FC.

Sin duda, de todo ello lo mejor fue su paso por los dos “grandes” equipos de La Paz.

“Por ejemplo tengo gratos recuerdos de 2002, fue un lindo año en The Strongest y mi rendimiento individual me llevó a salir a México. En Bolívar, el más lindo fue el de 2004, cuando logramos el subtítulo de la Copa Sudamericana. A nivel de la selección (20 partidos jugados y dos goles convertidos) siempre tuve buen rendimiento. Jugué tres eliminatorias y dos Copa América”.

Ahora está dedicado a la formación de jóvenes futbolistas. Si bien no tiene título de entrenador, le ayuda su trayectoria y la experiencia adquirida en el fútbol. “Estoy camino a capacitarme, es que trabajar con niños te motiva, es especial, les puedes transmitir cosas y ellos las captan rápidamente. Mi idea es ser un formador de niños en escuelas básicas”.

De vez en cuando, desde Europa se da “una escapada” para venir a la tierra en donde nació.

“Siempre vengo a ver a mi señora madre doña Asunta Paredes y a visitar la tumba de mi padre, don Alejandro, a quien siempre lo llevo en mi pensamiento. De paso contacto y converso con los amigos, por ejemplo con Marco Sandy. A mucha gente que me inculcó acercarme a Dios le agradezco, creo que elegí el mejor camino”.

Nunca hubiera querido irse de los clubes en donde mejor le fue con problemas por deudas. Tanto en The Strongest como en Bolívar le fallaron, y no tuvo otra que acudir a la justicia para cobrar.

“Estoy viendo cómo marchan los procesos judiciales con Bolívar y The Strongest. Siempre quise arreglar con ambos en su momento, pero no quisieron conciliar”.

Mira el estadio Siles y suspira. Es que ahí pasó grandes momentos, quizá los mejores de su carrera.

‘No hay apoyo a las divisiones inferiores’

Jaime Ayllón Desde lejos trata de seguir el fútbol boliviano. Se queda, por ejemplo, con la parte final de las anteriores eliminatorias. Ahí aparecieron algunos nuevos valores y Percy Colque considera que es el inicio para el recambio.

“Si la selección les da su lugar a esos nuevos futbolistas, será muy positivo e importante. Lamentablemente en Bolivia continúa la dejadez y no se les da lugar a las divisiones inferiores”.

En Suiza, donde radica, “me asombra cómo se les da dedicación a los niños, sobre todo hay una enseñanza personalizada. Cosas así deberíamos copiar. El fútbol, el deporte en general, hay que inculcarles desde el colegio. Me parece muy bien que el Estado organice Juegos Plurinacionales, se da participación a la niñez y a la juventud, sobre todo de las provincias. Ahí pueden surgir grandes valores”.

Considera que no es cierto que falten recursos, sino que los que hay son muy mal utilizados por los dirigentes de turno.

“Desde que yo jugué siempre nos dijeron que en el fútbol no había dinero, pero se nota que sí hay recursos; hay que saber invertirlos. Otro de los problemas es que no se da un buen trato a los jugadores ni se los valora, especialmente cuando están apareciendo, por ello muchos jugadores con talento tuvieron que desertar, pues tenían que poner de su bolsillo dinero para sustentarse en el sentido de pagar su pasajes y otras cosas. No solamente es entrenar y destacar, también uno debe tener una buena alimentación, lo que significa gastos. Falta interés de los dirigentes para apoyar a los jóvenes, cuando habría que apostar por ellos”.

Sueña con ver destacar a equipos bolivianos a nivel internacional. “Lo poco que se ve en Europa, por ejemplo, es la Libertadores, algunos partidos, no todos. Y da pena que a los equipos bolivianos les vaya tan mal. Nuestros clubes de alguna manera tienen que hacer grandes papeles, y eso es trabajando primero en las bases. Incluso, ese es el camino para que futbolistas nacionales vayan a jugar al exterior”.