Joaquín Botero ganará en el León FC de la Primera A mexicana lo mismo que cuando era jugador de los Pumas. El ex golero y técnico de la Selección Nacional Carlos Leonel Trucco le hizo el “gancho” para que volviera a ese país de Norteamérica. De manera que el goleador boliviano juega sus últimos partidos en Bolívar, aunque haciéndose a la idea de lo que será su nueva vida en la ciudad de León, en el estado mexicano de Guanajuato.
“Su uniforme es verde. Por ahí alguien me dijo que me va a quedar bien”, sostuvo Botero ayer, después del entrenamiento de la “Academia”. De hecho, le sienta muy bien ese color, pues es el de la Selección Nacional, con la que Joaquín ha destacado este año, lo que propició su regreso al fútbol internacional.
El León FC tenía varios jugadores candidatos a ocupar el puesto de delantero, pero Botero les sacó ventaja a todos los demás por su amplia experiencia en el fútbol azteca, después de haber jugado en los Pumas de la Primera División entre 2003 y 2006. Además, Carlos Trucco —vinculado al Pachuca, pero con muchos amigos en México— fue quien dio las mejores referencias del atacante para que fuera finalmente contratado.
A estas alturas del año, cuando está por concluir una temporada con Bolívar y empezar casi de inmediato otra en México, es inevitable que Botero esté pensando en ambas cosas. Sin embargo, asegura que lo más importante ahora es su presente con la “Academia”, el único club boliviano que lo ha tenido, del que quiere marcharse como campeón del torneo Play off.
Admitió, asimismo, que le dijo sí a la propuesta mexicana, porque le significará un progreso económico importante. Él mismo ratificó que ganará lo que le pagaba Pumas y no es de extrañarse, porque México es una potencia del fútbol y los clubes invierten varios millones de dólares en sus plantillas.
¿Se puede decir que a esta altura del año ya estás alistando maletas para volver a México?
Todavía no, en este momento mi pensamiento está en Bolívar y la campaña que venimos realizando en el Play off. En su momento hablaré más de mi futuro.
¿Cuándo tienes que presentarte en tu nuevo club?
Me han dicho que debo estar el día 26. El acuerdo está hecho.
¿Tendrás poca vacación o cabe la posibilidad de adelantar la despedida de Bolívar?
Estoy tranquilo, quiero terminar bien la campaña con Bolívar y quisiera que la despedida sea con el título del torneo Play off (lo que significa que puede jugar su último partido el 17 de este mes).
¿Qué significa este tu regreso al fútbol mexicano?
Primero, que es muy importante salir de nuevo. Si bien he apostado por Bolívar para este año, siempre dije que no estaba descartada la opción de jugar afuera, que es lo que quiere todo jugador. En Pumas me fue bien y creo que no habrá problemas para esta nueva etapa en León.
¿Falta algo por resolver?
Llegamos a un buen acuerdo en el tema económico, me ofrecieron ganar lo mismo que cuando estuve en Pumas, así que de esa manera estoy muy tranquilo.
¿Cómo se dieron los contactos para esta vinculación?
“Su uniforme es verde. Por ahí alguien me dijo que me va a quedar bien”, sostuvo Botero ayer, después del entrenamiento de la “Academia”. De hecho, le sienta muy bien ese color, pues es el de la Selección Nacional, con la que Joaquín ha destacado este año, lo que propició su regreso al fútbol internacional.
El León FC tenía varios jugadores candidatos a ocupar el puesto de delantero, pero Botero les sacó ventaja a todos los demás por su amplia experiencia en el fútbol azteca, después de haber jugado en los Pumas de la Primera División entre 2003 y 2006. Además, Carlos Trucco —vinculado al Pachuca, pero con muchos amigos en México— fue quien dio las mejores referencias del atacante para que fuera finalmente contratado.
A estas alturas del año, cuando está por concluir una temporada con Bolívar y empezar casi de inmediato otra en México, es inevitable que Botero esté pensando en ambas cosas. Sin embargo, asegura que lo más importante ahora es su presente con la “Academia”, el único club boliviano que lo ha tenido, del que quiere marcharse como campeón del torneo Play off.
Admitió, asimismo, que le dijo sí a la propuesta mexicana, porque le significará un progreso económico importante. Él mismo ratificó que ganará lo que le pagaba Pumas y no es de extrañarse, porque México es una potencia del fútbol y los clubes invierten varios millones de dólares en sus plantillas.
¿Se puede decir que a esta altura del año ya estás alistando maletas para volver a México?
Todavía no, en este momento mi pensamiento está en Bolívar y la campaña que venimos realizando en el Play off. En su momento hablaré más de mi futuro.
¿Cuándo tienes que presentarte en tu nuevo club?
Me han dicho que debo estar el día 26. El acuerdo está hecho.
¿Tendrás poca vacación o cabe la posibilidad de adelantar la despedida de Bolívar?
Estoy tranquilo, quiero terminar bien la campaña con Bolívar y quisiera que la despedida sea con el título del torneo Play off (lo que significa que puede jugar su último partido el 17 de este mes).
¿Qué significa este tu regreso al fútbol mexicano?
Primero, que es muy importante salir de nuevo. Si bien he apostado por Bolívar para este año, siempre dije que no estaba descartada la opción de jugar afuera, que es lo que quiere todo jugador. En Pumas me fue bien y creo que no habrá problemas para esta nueva etapa en León.
¿Falta algo por resolver?
Llegamos a un buen acuerdo en el tema económico, me ofrecieron ganar lo mismo que cuando estuve en Pumas, así que de esa manera estoy muy tranquilo.
¿Cómo se dieron los contactos para esta vinculación?
Nada de empresarios, fue a través de Carlos Leonel Trucco. Él trabaja en Pachuca (en la oficina deportiva y administrativa del club), le pidieron referencias de un delantero boliviano, me recomendó, tomaron el contacto conmigo y gente del club vino a La Paz, donde comenzamos las negociaciones y llegamos a un acuerdo.
¿Cómo es el fútbol de Primera A (segunda división) en México?
Es de alta competencia, se juegan partidos muy intensos. El campeonato empieza en enero y termina en mayo, se ingresa en un mes de vacación, luego hay que volver al trabajo para el segundo certamen que comienza en agosto hasta diciembre. La mayor parte del tiempo uno está en actividad.
¿Qué conoces de tu nuevo club?
Es permanente protagonista del torneo. Cuando me fui a Pumas en 2002 sabía que estaba peleando el ascenso a la Primera División. Es desde entonces que está en busca del objetivo, que no se ha podido dar por esas cosas del fútbol.
La gente que vino a hablar conmigo me dijo que la apuesta es por ascender y me gusta ese desafío, lo acepté por los planes que tiene el club.
¿Con qué colores te identificarás en 2009?
El verde, ya me dijeron que me va a quedar bien.
Su nuevo club
El León fue fundado el 20 de agosto de 1944, es representante de la ciudad del mismo nombre, del estado de Guanajuato. Ha jugado en la división de honor por varios años, fue campeón en 1948, 1949, 1952, 1956 y 1992, pero le tocó descender. Desde la temporada de 2002 intenta volver a la división privilegiada. Su presidente es Javier Minar Ochoa, y dirige técnicamente al plantel Víctor Manuel Vucetich, quien trabajó en varios clubes de ese país.
La otra mirada
EL SEGUNDO
El todavía delantero de Bolívar será el segundo boliviano en jugar en esa categoría. El primero fue Marco Sandy, quien militó en el Tampico Madero. Otros futbolistas nacionales que jugaron en ese país, pero en la división de honor, son José Alfredo Castillo (quien todavía tiene contrato con Tecos de Guadalajara) y Jesús Reynaldo (Toluca).
EN EL “NOU CAMP”
El nuevo club de Botero juega sus partidos de local en el estadio León, conocido popularmente como el “Nou Camp”, igual al del Barcelona español. Fue inaugurado en 1967 y tiene capacidad para aproximadamente 33.000 personas. Casi la totalidad de sus tribunas está pintada de verde, color del club.
LA PRIMERA A MEXICANA
El torneo fue establecido en 1994, cuando se intentó crear una “Liga Premier” y la Segunda División cambió de nombre a Primera A, como se le conoce actualmente. Se juegan dos torneos por año. En cada uno, ocho equipos califican a una liguilla. Ésta consiste en partidos de ida y vuelta de cuartos de final, semifinal y la gran final. Para ascender a Primera División el equipo debe ganar un torneo y disputar un “juego de ascenso” ante el ganador del otro, o bien puede ganar los dos y obtener su pase automáticamente.
Esta temporada consiguieron su boleto a Primera los Indios de Ciudad Juárez y los Dorados de Culiacán.
SUS RIVALES
En la Primera A participan 27 clubes divididos en tres grupos. El nuevo club de Botero está en el uno, con Dorados, Académicos de Tonalá, Tapatío, Salamanca, Real Colima, Tecos A, Irapuato y Tijuana. En el primer torneo de la temporada fue segundo.
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