Con la voz cargada de tristeza, por momentos entrecortada, y con la mirada casi al vacío, Maximiliano Ortiz, defensor de The Strongest, confesó a DIEZ que le duele ver la situación por la que está atravesando Blooming.
Las deudas golpearon muy duro al club cruceño y Ortiz es consciente de aquello. Por eso, para evitar que los problemas continúen, el defensor explicó que habló con la dirigencia para subsanar la deuda que tienen con él.
Los dirigentes afirmaron que hasta hoy (lunes) se pondrán al día en el tema de deudas.
Fernando Cuéllar, asesor legal de Blooming, explicó que dialogó con Ortiz, llegando ambos a un acuerdo.
Un total de 26.000 dólares son los que reclama el zaguero a la academia cruceña, aseverando que su intención no es perjudicar más a Blooming, por lo que esperará a que la dirigencia se comunique en los siguientes días.
Ortiz señaló que siente un gran cariño por la camiseta de Blooming, indicó que tiene un gran respeto por los hinchas y que por esos motivos no quiere perjudicar a la institución con una futura quita de más puntos.
El equipo cruceño ya perdió seis unidades en los pasados días, el primero de los casos por el jugador Ignacio Ithurralde, que demandó al club por una deuda y la FIFA ordenó que le restaran puntos en la tabla de posiciones. La segunda quita de puntos por el también defensor paraguayo Marcos Acosta. Ortiz no quiere llegar a esos extremos e indicó que, a pesar de que su salida no fue como él quería, no pretende sacar provecho ni hacerle daño a la institución que en su momento le abrió las puertas.
En los pasados meses tuvo un fuerte cruce de palabras a través de las redes sociales con Rubén Tufiño, gerente deportivo de Blooming. El funcionario calificó al jugador de malagradecido; Ortiz no se quedó atrás y respondió con términos parecidos.
A través de un comunicado en WhatsApp dejó claramente establecido que su intención era salir por la puerta grande. El problema continúa, a pesar de que el presente de Ortiz está en The Strongest. El defensor indicó que esperará un tiempo prudente por una respuesta de la dirigencia celeste.
Por ahora, Ortiz no se cansa de decir que le duele muchísimo la forma cómo sus excompañeros de equipo viven los problemas económicos. Explicó que para un futbolista siempre es importante tener una tranquilidad salarial para poder desempeñar sus funciones de la mejor manera.
Ahora, en el Tigre, Ortiz manifestó que es distinto, reconoció que él y su familia viven tranquilos porque el club paceño les ha dado estabilidad económica.
A su llegada a La Paz se ganó la confianza del exentrenador atigrado Carlos Ischia, quien lo cambió de zaguero a lateral derecho. Ortiz reconoció que se sintió cómodo jugando en este puesto, pero si le dieran a elegir prefiere seguir jugando como marcador central. Con el argentino que se fue, el exdefensor de Blooming jugó casi todos los partidos de titular, incluso pudo anotar algunos goles.
Con la llegada de César Farías su situación cambió, ahora Ortiz espera ser tomado más en cuenta. En las últimas prácticas demostró que quiere luchar por un puesto con los otros centrales, Fernando Martelli y Edison Carcelén. El técnico venezolano indicó que Ortiz es un buen jugador y dentro de poco tendrá más minutos de juego.
Ortiz espera jugar los partidos de Copa Libertadores, insistiendo en que en La Paz se siente más tranquilo y contento porque su familia se adaptó de manera rápida a la nueva ciudad, aunque el jugador se sinceró al indicar que aún extraña Santa Cruz, donde no descarta regresar algún día, donde asegura tener muchos amigos. Para no perder contacto con ellos, viaja las veces que puede o el equipo se lo permite.
¿Sientes que ya te has adaptado por completo a La Paz?
La verdad es que me siento muy bien, esperando ahora tener una oportunidad para seguir mostrando mi fútbol. Ya llevo un buen tiempo viviendo en La Paz y cada vez me siento mejor; la verdad es que esta ciudad me gusta mucho, no solo a mí, sino también a toda mi familia.
¿Extrañas Santa Cruz?
Bueno, por ahí un poco el clima sí; La Paz y Santa Cruz tienen climas muy distintos, pero acá me siento cómodo porque ya me acostumbré; se puede vivir de manera tranquila el día a día
¿Qué dijo la familia al momento de cambiar a Santa Cruz por La Paz?
Mi familia está preparada para los cambios que ocurren, sabe que así es la vida del futbolista y me apoya. Por ejemplo, en La Paz se acomodó bien y todos estamos tranquilos. Esta ciudad nos gustó bastante, estamos en una zona muy tranquila, yo trabajo tranquilo y estoy en un club bastante ordenado. The Strongest es uno de los equipos más grandes de Bolivia y, la verdad, me siento feliz, no me puedo quejar, así que ahora cada día dejo lo mejor de mí en cada entrenamiento.
¿Estás tranquilo sabiendo que en Blooming, donde jugabas, los jugadores tienen problemas económicos?
Sí, la verdad es que en Blooming siempre aparecían problemas, sobre todo en lo económico. Recuerdo que no se podía trabajar tranquilo, es totalmente opuesto a lo que ocurre en The Strongest, donde uno como jugador únicamente se concentra en hacer bien las cosas en la cancha. Mis compañeros y yo en el Tigre no tenemos otro tipo de preocupaciones. La verdad es que sentí un cambio importante al llegar a La Paz, sobre todo en el tema económico.
¿En qué momento dijiste ‘ya no doy más en Blooming y busco otro camino’?
Fue al final del torneo pasado. Pasaron una serie de cosas, hubo algunas diferencias con algunos dirigentes del club, no estaba a gusto y tampoco me sentía cómodo, por todo eso preferí salir del club y esperar alguna posibilidad de otro equipo en enero, hasta que apareció la posibilidad de jugar en The Strongest. La oferta que me hicieron llegar me sedujo y no lo pensé dos veces para comenzar a trabajar en este gran club.
¿Cómo es ahora tu relación con la dirigencia de Blooming?
Soy sincero, no está del todo bien, todavía existe una deuda que tienen conmigo. Me dolió tener que demandar al club, pero no tuve otra alternativa porque no me pagaban; el fallo ya salió, la resolución igual, Blooming me debe una cierta cantidad de dinero y yo, por mi parte, espero cobrar esa plata para cerrar mi etapa en Blooming, donde en lo futbolístico y en lo personal me fue muy bien, pero en la relación con la dirigencia no tanto, porque hubo ciertas diferencias que salieron a la luz pública.
¿Ya te hablaron para solucionar tu deuda?
La verdad es que ellos no me llamaron, tuve que hacerlo yo, obviamente porque fui parte del club, donde tengo muchos amigos y guardo recuerdos lindos de ese equipo. Me entristece ver la realidad que atraviesa Blooming, esa situación es muy dura para cualquier jugador. Yo, en lo personal, no quiero complicar más la situación de ese club, para nada quiero ser un motivo de problema. Ofrecí lo que ofrecí en un cierto momento al club, a ver si ellos están interesados en arreglar conmigo esa parte; esperemos que todo salga bien y de esta manera brindarle una mano al club que la está pasando mal.
En serio, ¿tu intención es de no restarle más puntos a Blooming?
Para nada. No quiero que Blooming se vea más perjudicado, por eso me comuniqué con la dirigencia para brindarles una mano. Mi intención es tratar de que mi problema no se convierta en otro dolor de cabeza para ellos. Espero que los dirigentes vean que esto se debe resolver de la mejor manera y lo más antes posible. No quiero estar más intranquilo con este tema, yo estoy seguro de que hice bien las cosas y, repito, no quiero perjudicar al club.
¿Qué le decís al hincha de Blooming?
Que yo me sentí muy bien en el club, que llegué a sentir un gran cariño por la institución y por la camiseta, pero lamentablemente me tuve que ir de esa forma porque la dirigencia no aceptó mis términos, me dolió muchísimo la manera en que algunos dirigentes hablaron muy mal de mí, me hicieron quedar mal ante la gente. No es lo que ellos dicen, y para que vean que soy buena persona, y no un malagradecido como se dijo, en su momento decidí hablar con los dirigentes para arreglar mi problema de la mejor forma, sin que haya perjudicados.
¿Sos naturalizado o tenés doble nacionalidad?
Yo ya fui convocado a la selección nacional, ese tema está claro, tengo doble nacionalidad, no soy naturalizado, mi padre es boliviano.
¿Querés volver a la selección?
Sí, espero estar de nuevo en la convocatoria de la selección, para eso me esfuerzo al máximo en cada partido, para que se fijen en mí nuevamente.
¿Hincha de qué equipo sos?
De Instituto, de Argentina, donde debuté como jugador profesional. Sigo de cerca el fútbol argentino, me gusta ver cómo se juegan los partidos, con mucha entrega y adrenalina; ahora acá, en Bolivia, soy de The Strongest, un club grande de este país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario