Lampe y un día inolvidable en el Santiago Bernabéu, del Madrid

A pesar del dolor que significó la derrota de sus compañeros de Boca Juniors ante el rival de toda la vida, el arquero boliviano Carlos Lampe vivió, seguro, el mejor día en su carrera futbolística en el estadio Santiago Bernabéu, a pesar de que no estuvo entre los 18 que fueron convocados para el duelo ante River Plate. El portero de la selección terminó su contrato con el xeneize y en estos días se definirá si se queda, pues condiciones le sobran, más allá de que no tuvo la oportunidad para demostrarlas.

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Fue un día de emociones y ansiedad para todos los jugadores xeneizes, y Lampe no fue la excepción, así se lo pudo evidenciar por las gráficas que se vieron del boliviano desde que ingresó al estadio del Real Madrid, donde se disputó la final histórica de la Copa Libertadores.

Lampe se tomó fotos ni bien pisó el césped, luego posó junto a Óscar Córdoba, exarquero histórico de Boca que ganó todo con el club xeneize, incluida la Libertadores y la Copa Intercontinental de 2000 contra el Real Madrid.
Lampe junto a sus compañeros en el Bernabéu

Después se pudo ver al portero cruceño sentado con varios de sus compañeros de equipo, que, al igual que él, no fueron tomados en cuenta por el técnico Guillermo Barros Schelotto. En la foto, Lampe está con Edwin Cardona, Emmanuel Mas, entre otros.

También posó en el vestuario del Real Madrid (por sorteo a Boca le tocó el camarín del primer equipo merengue) sentado y delante de la camiseta número 28 verde, número con el que fue inscrito en la Libertadores.

A pesar de la euforia que significó el gol de Darío Benedetto (fue el 1-0 para el xeneize), todo terminó en tristeza para Boca, que se quedó hasta el final para recibir las medallas por el segundo lugar en esta Copa.

Lampe recibió con mucho respeto su presea, mientras algunos de sus compañeros no quisieron colgársela. Al boliviano se lo vio con una cara triste y con los ojos rojizos por el llanto derramado tras la derrota.

No pudo demostrar

Lampe no pudo demostrar sus condiciones, pues nunca tuvo la chance de ser titular, a pesar de que Agustín Rossi y Andrada no exhibieron un gran nivel y, al contrario, dejaron dudas en los partidos que les tocó jugar.

El portero de la selección boliviana llegó de emergencia a Boca para las semifinales de la Copa ante Palmeiras, debido a que Andrada, que era el titular, se lesionó de la mandíbula (fue operado de una fractura). Sin embargo, el DT xeneize decidió dar la confianza a Rossi para las semifinales y también para la primera final ante River, en la Bombonera.

Ayer, Andrada no tuvo su mejor noche, un mal despeje suyo provocó el segundo gol para el millonario. Después se lo notó falto de confianza, por último terminó en el área rival buscando el empate, cuando Boca perdía 2-1, pero dejó su arco vacío y el ‘Pity’ Martínez lo liquidó anotando el 3-1.