Siempre frontal, el exfutbolista de The Strongest y otros clubes no le asigna posibilidades de clasificación a la Verde al Mundial de Rusia 2018, debido a que no hay el nivel futbolístico adecuado y encima hay problemas que afectan a nuestro fútbol, sobre todo relacionados con la dirigencia. Cree que se puede ganar algunos partidos, pero no más de eso. Igual, hay que apoyar al cuerpo técnico que encabeza Baldivieso. Es de la idea de que el fútbol nacional tiene que empezar de cero para producir un verdadero cambio.
— ¿Cómo cree que le va a ir a Bolivia en las eliminatorias?
— No creo que Bolivia tenga chances para ir al Mundial de Rusia en 2018. Tenemos (en el país) que ser realistas. Yo sé que a veces hay gente a la que no le gusta que uno declare estas cosas; sin embargo se supone que somos los últimos en Sudamérica y si somos los últimos, ¿qué tendríamos que hacer para tratar de emparejarnos un poco con algunos? Tendríamos que trabajar el doble de lo que trabajan las demás selecciones, y sin embargo nosotros trabajamos la mitad de lo que se entrenan los demás.
— ¿Quiénes son responsables de esta situación?
— No les echo la culpa ni al cuerpo técnico y menos a los jugadores porque al final ellos están supeditados a una directiva, que no tiene el reconocimiento. Seguramente habrá clubes que cuando pasen dos o tres fechas de las eliminatorias no van a querer prestar a los jugadores con los días de anticipación que requiera el cuerpo técnico, yo ya conozco cómo es todo esto. Son muchos los problemas que hay en el fútbol.
— ¿La elección de Julio Baldivieso como técnico ha sido acertada?
— Baldivieso hace años que estaba pidiendo una oportunidad, ahora se la han dado y está bien. Había dos o tres técnicos más que podían estar, pero si el elegido es Baldivieso hay que aceptarlo, hay que apoyarlo, hay que darle todas las condiciones y ojalá que las cosas le salgan bien, porque si a él le va bien, le va bien a la selección, todos van a estar felices, pero no hay que buscar culpables si los resultados no son buenos.
— ¿Qué futuro le augura a la selección con todo lo que marca?
—No le veo un gran futuro, aunque podemos ganar algunos partidos en La Paz porque sabemos que hay muchos países, Uruguay es uno de ellos, que aquí no rinden ni al 30% de lo que rinden al nivel del mar, entonces eso tenemos que aprovechar. Yo creo que vamos a ganar algunos partidos, pero también hay equipos que ya saben jugar en la altura y ya lo han demostrado en muchas eliminatorias, cuando Bolivia tenía equipos mucho más poderosos, entonces siempre digo que con un solo partido que perdamos de local o un par de empates, ya prácticamente no tendríamos ninguna chance de clasificación, porque no veo en estos momentos un equipo tan bien preparado como para sacar puntos de visitante.
— ¿No tenemos equipo o buenos jugadores para afrontar los partidos fuera de La Paz?
— Yo nunca voy a hablar en contra de los jugadores, porque todos los que están en la selección ahora van a poner el máximo esfuerzo, van a dejar la vida por la camiseta de su país; pero eso solo no alcanza. No hay un gran nivel de jugadores desequilibrantes, jugadores que puedan marcar cierta diferencia. Hay un grupo de jóvenes con buen nivel, pero faltan esos tres o cuatro de jerarquía que puedan desequilibrar y quizás en determinado partido se van a notar esas ausencias.
— ¿Influye que las demás selecciones tengan jugadores de gran nivel en clubes de las principales ligas del mundo y nosotros no?
— Claro que influye, porque eso demuestra que el nivel nuestro es bajo. Con todo el dolor del alma hay que reconocer que nuestro nivel es bajo. Tenemos un par de jugadores en Medio Oriente, algunos por China, pero más de eso no tenemos. Usted ve los partidos de la Champions y, por ejemplo ayer (por el miércoles) estuve viendo que en casi todos los equipos poderosos del mundo hay argentinos, hay brasileños, algunos uruguayos, algunos colombianos, algunos chilenos… y de por aquí ni por asomo tenemos jugadores en esas ligas. No sé cuál será el problema, pero seguimos siempre en lo mismo, acá la gente cree que porque han detenido a cuatro o cinco dirigentes de la anterior gestión de la Federación Boliviana de Fútbol ya las cosas estaban todas solucionadas, no es así; mientras no empecemos de cero a todo nivel no vamos a mejorar nada.
En estos momentos yo creo que estamos igual que antes o quizás peor, y no es culpa de los dirigentes que están ahora porque al final ellos se han hecho cargo, pero ni sabían de la cantidad de problemas que hay en el fútbol: no los reconocen en la Conmebol, falta dinero por aquí, por allá, no hay recursos económicos, entonces estos tres o cuatro dirigentes que se han hecho cargo ahora, realmente… yo a veces les veo las caras cuando hacen declaraciones y como que no están tan felices de estar en esos cargos. No debe ser fácil manejar una Federación de fútbol, más con las eliminatorias encima y más con todos los problemas que tiene Bolivia.
— ¿La anterior dirigencia es la culpable de lo que pasa?
— No sé, acá todos nosotros somos muy buenos para echarle la culpa al otro. Por ejemplo, si Bolivia no juega bien el próximo partido van a seguir gritando “fuera Chávez” o ahora será “fuera Ortega”, no sé. Siempre le echamos la culpa a alguien. Yo creo que (Carlos) Chávez ya había cumplido su ciclo, ya pasó, veremos qué pasa con las nuevas gestiones; pero no busquemos siempre culpables.
Como dije anteriormente, si nosotros no trabajamos el doble que los demás equipos nunca vamos a conseguir nada, nosotros tenemos una gran ventaja de jugar aquí, en La Paz, por más que alguno se enoje sabemos que ésa es la gran ventaja y la tenemos que aprovechar al máximo si realmente queremos conseguir algo importante. Basta de echarles la culpa a los dirigentes, a los que estaban antes, a los que están ahora; los que juegan son los jugadores, pero para poder reclamarles a los jugadores hay que darles condiciones también.
— ¿Trabajar el doble y desde las divisiones inferiores debería ser la consigna?
— Desde hace 45 años que estoy en Bolivia y siempre se dice lo mismo, nunca se trabaja en nada, por eso digo que hay que empezar de cero.
— Con todos los problemas y el poco tiempo de trabajo ¿cómo vamos a llegar al debut?
— No hubo la cantidad de días necesarios para entrenar, yo creo que el técnico (Julio Baldivieso) hubiera querido tenerlos unos días más a todos los jugadores, porque acá la única posibilidad que tenemos es correr y correr mucho, presionar; pero para eso tenemos que estar muy bien entrenados en la altura. No todos los jugadores son de altura, los que están son de Bolívar, The Strongest y alguno más, puede ser; pero los que vienen del oriente necesitan más tiempo de aclimatación; todo eso el cuerpo técnico lo debe estar evaluando, seguro va a poner a los mejores jugadores de rendimiento en la altitud.
— ¿Cuánto ayuda jugar con una mayoría de futbolistas acostumbrados a la altitud?
— Yo creo que a Bolivia le ha tocado un primer partido bastante ventajoso, porque Uruguay es uno de los países que menos rinde aquí en La Paz, creo que nunca ha ganado, y por ese lado trataremos que siga esa racha y que siga ganando Bolivia.
— A propósito de Uruguay, a usted le tocó jugar una eliminatoria con Bolivia y justamente contra la selección uruguaya para el Mundial de Italia 1990...
— Hace 26 años de eso (1989), el nuestro era un equipo ya grande quizás; pero de mucha personalidad, había jugadores de un nivel altísimo como (Erwin) Chichi Romero, estaba Álvaro Peña, Milton Melgar, Eligio Martínez, (Luis) Galarza en el arco, teníamos un equipo de mucho peso y muy buen equipo; pero también Uruguay tenía uno de los mejores equipos que ha tenido en su historia: (Antonio) Alzamendi, (Santiago) Ostolaza, (Enzo) Francescoli, Rubén Paz y Rubén Sosa, creo que nunca más llegó a tener una delantera como ésa. Y tuvimos la suerte de ganarle aquí, ganamos los dos partidos de local, la otra selección era Perú, a la que le ganamos en Lima; pero no nos alcanzó, y por diferencia de goles no pudimos ir a Italia.
— ¿Qué recuerda de ese partido con los uruguayos?
— Fue un partido complicado, ganamos con lo justo (2-1), con un gol de Álvaro Peña y el otro creo que fue autogol. Después, en la revancha, cuando nos tocó jugar en Montevideo, fue más complicado porque lo habían echado a Platiní (Erwin Sánchez) a los cinco minutos, a mí me expulsaron sobre la hora; pero era muy difícil porque prácticamente nos “bombearon” todo el partido, y bueno... tenían que clasificarse ellos.
— Después de Uruguay de inmediato se juega con Ecuador en Quito ¿va a ser más complicado?
— Yo creo que sí porque Ecuador tiene un excelente equipo y buenos jugadores, he visto sus clubes en la Copa Libertadores, Sudamericana, tiene gente muy importante jugando en el extranjero y para Bolivia va a ser un rival muy duro; pero primero es lo primero, hay que pensar en Uruguay. Sí se puede ganar aquí, ya los jugadores van a ir con cierta confianza, con cierta tranquilidad al partido con Ecuador. De visitante se puede perder, pero por lo menos tratar de asegurar el partido aquí.
— ¿Cree que la gente igual está ilusionada con la selección?
— La gente siempre se ilusiona, desgraciadamente a veces es un martirio la selección, la gente sufre mucho; pero ahora es una nueva etapa. La gente está confiada porque empieza un nuevo proceso, ojalá que sigamos teniendo confianza después de los primeros partidos.
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