Su corta carrera como futbolista goza de varias anécdotas, que van desde sus partidos con la división menor hasta compartir el vestuario con los jugadores del primer plantel, actualmente vive con su madre Gabriela Lee a quien Esteban le agradece todo el apoyo que tiene para haber llegado a la profesional de la academia.
Su padre Jae Dong Um con quien no tiene contacto hace algún tiempo radica en Santa Cruz, él joven jugador tiene 18 años, ya debutó en la primera división del fútbol nacional con Bolívar, lo hizo el año pasado ante Petrolero.
Oscar Villegas director técnico de las divisiones menores de la academia lo recuerda como un chico muy disciplinado, soñador, entregado al deporte.
¿Naciste acá o fuera del país?
-Soy paceño nací, acá, pero mis papás son de Corea del Sur, ellos tienen una historia tras suyo de porque decidieron emigrar hasta Bolivia.
¿Vinieron juntos desde Corea?
-No, ellos se conocieron acá, mi padre tenía una empresa y ahí conoció a mi mamá, luego nací yo.
¿Tienes hermanos?
-Si, tengo uno vive en Santa Cruz con mi papá, de él tampoco se mucho, mi papás están divorciados.
¿Tu hermano igual juega fútbol?
-No, para nada él tiene otras aptitudes, otros talentos, yo tengo este privilegio de jugar fútbol, le dedico mucho tiempo, siempre hay muchas cosas que mejorar y aprender.
¿Sigues en colegio?
-Estoy en la promoción del colegio Israelita, ya dentro de poco espero juntar los estudios a nivel universitario con el fútbol, me gusta el marketing, estudiaré esa carrera.
¿Qué te dice tu mamá, sobre el fútbol y los estudios?
-Ella me pide que no descuide ambas cosas, debo hacer ambas cosas, el fútbol no pienso dejarlo, mi mamá es un gran apoyo para mí, sin ella nada de lo que conseguí lo hubiera conseguido.
¿Dónde comenzaste a jugar fútbol?
-Desde muy chiquito que me gustó el fútbol, jugaba en mi ex colegio Bancario, luego pase a las divisiones menores de Bolívar donde crecí, me formé y llegué a estar dentro el primer equipo.
¿Qué recuerdas de tus inicios en Bolívar?
-Los consejos que siempre nos dan, que hay que luchar cada balón, el partido no termina hasta que el último segundo, todo esas cosas me enseñaron a perseverar, recuerdo que antes yo era delantero, pero el profesor Oscar (Villegas) encontró un nuevo puesto para mí de mediocampista.
¿Debutaste en la primera división?
-Sí, lo hice el año pasado ante Petrolero, ingresé en el segundo tiempo, estaba algo nervioso, no pierdo la oportunidad de poder jugar con el primer equipo, mientras tengo minutos de juego en el torneo de Promoción y Reservas.
¿Qué te hace falta para llegar más lejos?
-Trabajar en la parte física, los jugadores jóvenes necesitamos un centro de alto rendimiento, espero que las autoridades del país y de la FBF puedan hacerlo, creo que todos necesitamos un lugar donde entrenar para así salir y competir con otros equipos de talla internacional.
¿Te imaginas con la polera de la selección nacional?
-Sería un sueño hecho realidad, pero todo se consigue paso a paso, primer espero ser tomado en cuenta en la selección nacional sub-20, y luego luchar para llegar para la mayor.
¿No hay muchos jugadores en Bolivia que vengan de Corea qué opinas?
-Para mí es un privilegio haber nacido acá, después estoy consciente que debo llevar en alto el nombre de mis antepasados.
¿Qué jugador admiras?
-Por todo lo que me enseña, Leonel Justiniano, creo que es uno de los mejores jugadores del fútbol nacional y es a él a quien admiro y respeto mucho.
¿Tienes algún representante?
-No, mi mamá es quien se encarga de velar por mi futuro, no pienso dejar Bolívar aúnque quizás en un futuro pueda salir a otro equipo.
¿Cómo ves el futuro de nuestro fútbol?
-Depende, si los dirigentes se ponen la mano al pecho nos irá bien, de lo contrario creo que muy poco cambiará.
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