Nacido en Cuiabá, Brasil, tiene 25 años de edad y es hijo del brasileño Manuel Hermoza y la boliviana Alcira Rojas. Está casado con la brasileña Cibele Duarte, con quien tiene una hija de cuatro años, Alicia. Se formó en las divisiones menores del Atlético Paranaense, de ahí pasó al Figuerense y al Guaratinguetá de Brasil. Dio el salto al fútbol europeo para pasar a jugar desde junio del 2008 en el club Naval. El jugador boliviano tiene contrato en Portugal hasta junio del próximo año, y espera primero ayudar a su equipo a salir de la zona del descenso donde se encuentra. Es considerado un ju
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— Eres alguien que, por decirlo de esta manera, apareció de la noche a la mañana, ¿quién eres como futbolista?
— Como futbolista me formé en las categorías menores del Atlético Paranaense (Brasil). Fui a un campeonato en Mato Grosso, en Cuiabá, y unos representantes me vieron y me llevaron al Atlético Paranaense para que me hiciera una prueba. Les gustó y comencé a jugar allá en divisiones inferiores, me quedé unos siete años y luego jugué en Primera. De ahí salté a Portugal, a jugar en el Naval, donde ya voy por mi tercer año. Todavía espero que aparezca alguna propuesta de un club con más pergaminos.
— Eres boliviano por parte de tu mamá, ¿viviste en Bolivia en algún momento de tu vida?
— Sí, viví en San Matías (localidad fronteriza con el Brasil, que se encuentra ubicada en el departamento de Santa Cruz) y después, la mayor parte, en Brasil. De tanto en tanto voy a Santa Cruz a visitar a algunos amigos y a mis hermanas que viven allá; también voy a ver a la familia de mi mamá.
— ¿Tu niñez la viviste en Bolivia?
— En San Matías unos años, y también en Cuiabá, donde nací. Tuve una niñez muy buena, siempre me la pasé jugando (al fútbol) y esas cosas, pero también ayudando a mis papás.
— ¿Dónde pasaste más tiempo, en Brasil o en Bolivia?
— En Brasil, porque en Bolivia viví sólo unos cinco años y además no continuos. Mi papá iba y venía, viajaba por el trabajo, porque tenía que ganarse la vida para mantenernos a todos, así que pasábamos entre Brasil y Bolivia.
— ¿Qué conoces de Bolivia?
— Solamente conozco Santa Cruz, es una ciudad muy linda, su gente es muy hospitalaria y muy alegre, después no conozco nada más, además de San Matías, el pueblo donde viví algunos años.
— ¿Cuándo fue la última vez que estuviste en el país?
— Hace unos tres años fui a Santa Cruz, a visitar a mis amigos y familiares, y a pasear con mi familia, con mi esposa y con mi hija a quienes les gustó mucho el país.
— ¿Te sientes identificado con Bolivia y con la selección?
— Sí, yo creo que sí, porque siempre cuando la selección juega me gusta mucho, desde chico fue así, por mi mamá, que es boliviana, y porque cuando vivía en Bolivia siempre era hincha de la selección, así que le tengo un cariño muy grande. Como viví allá un tiempo, tengo un ligazón con el país, tengo sangre boliviana también, eso no lo olvido.
— ¿Qué sabes del fútbol boliviano?
— Conozco algo. Sé, por ejemplo, que Oriente Petrolero, Bolívar y The Strongest son los equipos que están siempre peleando la punta del torneo local y que participan en certámenes internacionales, son los que tienen jugadores de mayor calidad.
— De pronto un día se habló de ti y de que podías ser convocado a la selección, ¿cómo surgió ese contacto y esa posibilidad?
— Los dirigentes de la Federación Boliviana se contactaron conmigo, me hablaron de la posibilidad, así que hasta el 20 de este mes, a más tardar, estaré en Santa Cruz para resolver mi situación. Antes quiero pasar unos días con mi familia a la que no veo desde hace mucho tiempo, así que iré también unos días a Curitiba.
— ¿Tu club ya sabe que estás convocado para Paraguay?
— Sí, ya hablaron los de la Federación con los dirigentes de mi equipo, todo está arreglado.
— Decías que vienes a resolver tu situación, ¿qué falta?
— Tengo que llevar mi certificado de nacimiento traducido por la Cancillería en Brasil, y luego habrá que ver su autenticidad. Me van a ayudar allá los dirigentes de la Federación, lo presentaremos en Santa Cruz e imagino que el trámite durará unos días.
Mientras tanto yo retornaré a Brasil para estar con mi familia. Tengo entendido que la convocatoria para los amistosos con Paraguay saldrá el 29 de mayo, así que, si soy convocado, volveré para el 30 y estaré a disposición del técnico, si es que así él lo dispone. Y si le agrada, me quedaría directo.
— ¿Cómo recibes esta oportunidad de jugar en la selección boliviana?
— Es una alegría muy grande, me gustaría mucho defender esa camiseta, porque se trata del país de mi mamá, por tanto mío también, y le tengo un cariño muy grande. Aparte, en lo futbolístico, sería una buena oportunidad para mostrarme.
— ¿Te ilusiona jugar la Copa América y también la eliminatoria para el Mundial 2014 de Brasil?
— Sí, es mi sueño, pero eso depende de mi capacidad y de demostrar que soy digno de vestir la camiseta de la selección. En Bolivia hay jugadores de mucha calidad y yo tengo que trabajar duro para mostrar que estoy en ese nivel, esa es la única manera de tener una oportunidad y representar al país. Quiero ayudar a la selección nacional, es mi sueño.
— La gente conoce poco de tu juego, ¿qué tipo de jugador eres?
— Me caracterizo por ser muy ofensivo, tengo buenos pases, me gusta tener la pelota y también llegar al área para finalizar, y por supuesto siempre busco marcar goles, creo que es lo mejor que sé hacer.
— A propósito, ¿cuántos goles has marcado esta temporada?
— Por ahora llevo cuatro goles y espero en estas fechas que quedan seguir anotando, eso ayudará a mi equipo y también será bueno para mí, para que el técnico de la selección pueda ver mi capacidad.
— ¿Cómo le va a tu equipo en el torneo de Portugal?
— Faltan dos partidos para que termine el torneo; estamos en una situación medio complicada, porque estamos en la zona del descenso, sin embargo espero que en lo que queda podamos mejorar un poco y sumar lo que nos hace falta para salvarnos. Y ojalá yo pueda ayudar.
— Volvamos a la Copa, ¿te enteraste el grupo que le tocó a Bolivia?
— Sé que el primer partido lo jugamos contra Argentina, creo que tenemos una oportunidad de hacer un buen papel. Los argentinos van a jugar en su casa y serán muy fuertes, pero en el fútbol nunca hay que olvidar que se juega once contra once. El resto, Japón y Colombia, son dos selecciones que tienen jugadores de calidad, pero Bolivia puede. No quisiera decir más porque primero tengo que estar con mis documentos al día y luego estar convocado. Y, lo más importante, tengo que agradarle al entrenador (se ríe).
— ¿Sabes cantar el Himno Nacional de Bolivia?
— Un poco (risas).
— Si vas a la Copa o juegas las eliminatorias vas a tener que cantarlo en las previas de los partidos...
— Uno aprende y, como sé un poco, no me costará mucho; pero primero, repito, espero ser convocado.
— ¿En el pasado viste algo de las actuaciones de la selección?
— Sí, vi el partido que le ganamos a Argentina por 6-1, fue un gran encuentro. Algunos otros más, me gustó mucho el equipo, creo que hay jugadores de gran nivel.
— ¿Conoces a algunos?
— Conozco a un jugador que fue al Atlético Paranaense cuando yo estaba allá, se quedó poco tiempo, pero estuve con él, lo ayudé, se llama Ronald Raldes, y conversé con él en esa época; después volvió para Argentina, creo que fue el año 2004, luego no supe más de él. Espero que le esté yendo bien, es una gran persona.
— Si hubiera una posibilidad para que juegues en el fútbol boliviano, ¿la pensarías?
— Por ahora no podría, porque mi sueño fue siempre jugar en Europa y recién estoy comenzando, aquí en Portugal. Todavía quiero llegar a un equipo grande y jugar a un alto nivel. Después, quizás.
En donde juega le llaman ‘Bolivia’
Desde que llegó al Atlético Paranaense lo apodaron así por sus orígenes
Ni Edivaldo ni Rojas. En su camiseta, en el Naval portugués, no lleva su nombre, sino la inscripción ‘Bolivia’. Así fue siempre, desde que se inició en el fútbol, porque así lo llamaban sus amigos y eso hoy no ha cambiado jamás.
“Llevo esa inscripción porque cuando llegué a las divisiones inferiores del Atlético Paranaense, el resto de los chicos me preguntaba de dónde era, y yo decía que de la frontera, que mi mamá era boliviana. Así que me decían: ‘entonces te vamos a llamar boliviano’ y al final me decían ‘Bolivia’. Ya no me llamaban Edivaldo y hasta ahora mis amigos, mis compañeros de equipo y mis familiares me siguen llamando así”, cuenta Edivaldo.
Hincha de la selección nacional desde pequeño, desde cuando vivió en San Matías, Edivaldo Rojas es un volante ofensivo de buenas condiciones, que juega por derecha o por izquierda, es un media punta, como él mismo se define, y tiene un buen remate, buena dinámica, buena estatura y buen juego con la cabeza, condiciones que espera mostrar en la selección nacional.
Conoce poco del fútbol boliviano. “Sólo veo algunos partidos de la selección por televisión, y hay jugadores de gran calidad, cada uno tiene su estilo, creo que es un fútbol competitivo también. Espero verlo de más cerca cuando llegue a Bolivia, aunque creo que también está por terminar el torneo”.
El director técnico Gustavo Quinteros le ha hecho un seguimiento permanente de los partidos que juega en la Liga de fútbol de Portugal, habló con él y ya lo ha incluido en la lista de jugadores convocados para los amistosos contra Paraguay, del mes de junio.
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