Ni bien se incorporó a la Verde, el pasado viernes, hizo un trabajo diferenciado por la molestia en el lado izquierdo de las costillas, que le impidió laborar con el resto del grupo, al que se reintegró el sábado. Sin embargo, persiste la dolencia, que según el médico de la Selección, Fabián Pacheco, es “muy crónico” y que había que “desinflamar el área, que no es de gran preocupación”.
Pero es posible que Raldes sea infiltrado para jugar ante Perú y Chile. “Él es un gran profesional, tiene un dolor crónico. Él está entrenando a la par de sus compañeros y no creo exista ningún inconveniente para que juegue los dos partidos”, aseguró Pacheco.
Con esas explicaciones del médico, se puede deducir que si el zaguero no estuviera en la plenitud de sus condiciones podría quedarse en La Paz para recuperarse por completo y esperar el lance ante Chile, todo dependerá del jugador y lo que indique, finalmente, el médico.
Por otra parte, el lateral izquierdo Juan Pablo Aponte sigue realizando trabajo diferenciado por una molestia en el bíceps femoral derecho, tras el parido con su equipo, Wilstermann, el pasado miércoles, por el torneo Clausura 2017. El sábado y ayer estuvo en esa tarea, al margen del grupo que tuvo una labor en doble turno la jornada dominical.
De acuerdo a Pacheco, Aponte está bien y a disposición del entrenador Mauricio Soria, “esperemos que no pase nada en el transcurso de estos entrenamientos. Todos están a disposición para el partido frente a Perú”, aseguró el profesional, quien reiteró que tuvieron cuidado con los jugadores, porque varios de ellos sostuvieron partidos seguidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario