La generación de futbolistas que dio una gran alegría a Bolivia, la clasificación al campeonato mundial de Estados Unidos, sigue en la memoria de la población.
La mayoría de quienes fueron parte de este grupo continúa hoy en día con actividades directamente vinculadas con el fútbol. No es un hecho casual, son deportistas que se ganaron su lugar y, consecuentemente, tuvieron la posibilidad de encontrar las puertas abiertas para seguir como directores técnicos. El caso de Gustavo Quinteros, que está como seleccionador de Ecuador; y Erwin Sánchez, en Boavista, equipo de Portugal.
Vladimir Soria está también vinculado con la dirección técnica y el propio Xavier Azkargorta, quien dirige actualmente el equipo de Sport Boys de Santa Cruz.
Otros llegaron a ser autoridades: Miguel Ángel Rimba, quien fue viceministro de Deportes.
Julio César Baldivieso, otro jugador importante en este grupo, se dedicó a la dirección técnica. Dirigió la Selección Nacional, además de equipos de la Liga.
Los jugadores de mayor renombre tuvieron la posibilidad de continuar en el fútbol, por el éxito alcanzado en 1994. El hecho de haber clasificado para el Mundial de Estados Unidos les abrió puertas en el país y pudieron perfilarse a nivel internacional, tal es el caso de Erwin Sánchez y Marco Etcheverry, que son dos casos concretos, así como Jaime Moreno y Héctor Cristaldo.
Estos jugadores tienen vigencia porque alcanzaron prestigio con la clasificación al Mundial de 1994.
Esa selección fue una de las mejores que hemos tenido en el país. Llegamos a ese año con un material único, que no se ha repetido desde entonces a la fecha, jugadores aptos, de exportación, y que tomaron la responsabilidad de vestir la camiseta como tiene que ser.
Nunca hubo una estructura sólida para el trabajo con las divisiones inferiores en el país, pero hemos tenido la fortuna, en ese entonces, de que hayan aparecido jugadores de tanta jerarquía y calidad técnica.
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