Un fuerte sentimiento de unidad se plasmó entre los ex futbolistas de 1963 y el plantel que clasificó al Mundial de 1993, a partir de una simpática y cálida reunión de confraternidad que organizó la Agremiación de Futbolistas Bolivia (Fabol), en ocasión del agasajo a los campeones sudamericanos de 1963 con el Cóndor de Los Andes por parte del ejecutivo de la FBF.
Encabezados por el capitán Wilfredo Camacho, los artífices de la conquista más importante del fútbol boliviano, acudieron a los diferentes actos realizados en Santa Cruz los días viernes y sábado. Estos deportistas que marcaron el hito más importante del fútbol nacional, fueron ovacionados y recibieron muestras de cariño de los diferentes estamentos del mundo futbolero boliviano.
Ramiro Blacutt, el que fuera veloz y eficiente puntero derecho de aquella memorable conquista, dijo que las muestras de cariño y reconocimiento recibidos “lo tenemos marcados en el corazón y a pesar del tiempo transcurrido, el título conseguido marcó sólidos cimientos de convencimiento de que los bolivianos estamos en condiciones de lograr grandes logros”, apuntó Blacut.
Personalidades del fútbol como el presidente de la Conmebol, Nicolás Leoz, el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), José María Marín, miembros del comité ejecutivo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), presididos por Carlos Chávez, y otros estamentos de este quehacer, participaron de la ceremonia estelar.
EL AGASAJO. Luego del partido amistoso que disputaron Bolivia y Brasil la tarde del sábado en el estadio “Tahuichi” Aguilera, cuyo resultado fue para la visita por 0-4, los campeones sudamericanos junto a los jugadores que hicieron posible la participación boliviana en el Mundial de EEUU-1994, se fundieron en una reunión de camaradería que le dio un marco especial y con fuerte sentimiento de unidad entre estas generaciones que le dieron al país los lauros más brillantes en el ámbito del fútbol internacional.
“Fue un encuentro de mucho alegría y hermandad, esperamos que esto pueda conducirnos a seguir siendo útiles al fútbol desde cualquier función, porque la lealtad y el cariño que nos ha mostrado Fabol aviva nuestro don de servicio y por el que estamos muy agradecidos”, subrayó Blacut, hoy director técnico, graduado en Alemania.
David Paniagua, secretario general de Fabol, declaró a Acción de La Prensa, que estaba complacido por el reconocimiento extendido a los Campeones Sudamericanos del ’63, y asimismo a los mundialistas del ’94. “Ahora me pregunto porque hemos esperado tanto tiempo para extender nuestro sincero afecto y admiración a esta camada de bolivianos que pusieron en alto al país en competIciones internacionales”, destaco el también ex futbolista y ahora abogado David Paniagua.
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