Con todo definido sobre su futuro inmediato, José Luis Chávez, exjugador de Blooming, habla de su reincorporación al club mexicano Atlas con un contrato de dos años y por un monto celosamente guardado. Sabe que los ojos de la dirigencia y de la prensa estarán sobre él por haber sido el primer refuerzo que pidió el técnico Tomás Boy, que regresa al cargo después de seis meses. El técnico fue el artífice de su llegada al fútbol azteca en diciembre de 2012.
Habla de la responsabilidad que tiene sobre sus hombros para demostrar que el DT no se equivocó en pedirlo y de repetir lo hecho en el torneo Clausura de la temporada 2012-2013, cuando se salvaron del descenso y pelearon por los primeros lugares del campeonato.
¿Ya está definida tu situación contractual?
No estoy un 100% seguro porque no he firmado aún mi contrato, pero lo que conversé con mi representante es que ya los dos clubes se pusieron de acuerdo y aceptaron las condiciones del contrato, por lo que es cuestión de horas para que todo se aclare.
¿Renunciaste a algo del contrato con tal de volver a jugar en el extranjero?
No, realmente las cosas se me han dado como quería, ya que es el nuevo entrenador (Tomás Boy) quien pidió que me contraten, así que gracias a Dios todo está bien porque la nueva dirigencia está trabajando con él en la conformación de un buen equipo que haga una mejor campaña que la del torneo Apertura.
¿Cómo ves el hecho de que Tomás Boy hubiera pedido que nuevamente te fichen?
Yo creo que es por el rendimiento regular que tuve cuando estuvo él como entrenador. Yo desde que llegué me di al máximo, en las primeras fechas me costó, aunque luego engrané en lo que él quería y llegué a jugar casi todos los partidos como titular.
¿Sientes que partes con ventaja por tener el respaldo del entrenador?
No creo, al contrario, siento que es más responsabilidad porque tengo que demostrar por qué me pidió el entrenador. Seguramente la prensa y los mismos dirigentes van a estar mirando mis actuaciones con mayor atención que otras veces. Confío que la entrega y la voluntad que pongo en cada partido sean uno de los justificativos para estar en Atlas, que es un equipo grande de México y donde estoy orgulloso de estar.
¿Cómo tomaste los comentarios de la prensa mexicana que cuestionaba tu pobre aporte al equipo en el último torneo?
Es que no fue un buen torneo, ni en lo personal ni en lo grupal se consiguieron los objetivos. No logré jugar mucho ni muy bien; así que es normal que hablen cuando las cosas no salen y más que comenten sobre tu continuidad en el equipo.
¿Sentiste que este tipo de publicaciones perjudicaría tu idea de seguir en México?
Seguro que alguna vez lo pensé así, porque la prensa me cayó fuerte y con críticas duras, como es en todos lados cuando los extranjeros no rinden, pero cuando hablé con los dirigentes, antes de venir para Bolivia, ellos me dijeron que estaban contentos conmigo, que querían que me quede, pero que debíamos esperar por el nuevo entrenador para saber qué decidía, ya que era él quien iba a tener la última palabra sobre eso.
¿Jugó a tu favor que el club tenga nuevo dueño?
No, pasa que el entrenador me pidió y los dirigentes tenían que hacer las gestiones para lograr que me quedara y por suerte todo se dio conforme a lo esperado. Él está armando su equipo y el directorio solo quiere darle las condiciones para que así sea.
¿Por qué compra y no préstamo, por un año más?
No había más opción. La gente de Blooming ya me había prestado dos veces y si los de Atlas querían seguir contando conmigo, en el equipo ya tenían que hacer uso de la opción de compra que está en la cláusula del préstamo y tiene validez hasta el 31 de enero de 2014.
¿Por cuánto tiempo Atlas te ofrece un contrato?
Lo que me han dicho es que el contrato tiene duración de dos años. Después de este tiempo el club verá si quiere renovarlo o quedo en libertad para jugar donde yo vea que es mejor para mí. Durante esos 24 meses, Atlas puede prestarme a otro equipo de México o de otro país.
¿Ganan todos con tu venta al fútbol mexicano?
Seguro que sí, a Blooming le entrara buena plata para pagar las deudas que tiene y yo estoy teniendo una mejora económica, no mucho más de lo que ya ganaba, pero sí hay mejores cosas para y eso me deja tranquilo.
¿Llegaste a pensar que se acabó tu camino en el fútbol internacional?
Había mucha incertidumbre, ya que todo estaba en manos del nuevo técnico y los nuevos dueños se tomaron su tiempo en definir. Eso hacía más desesperante la espera, pues los
dirigentes querían que me quede, pero todo dependía del entrenador.
¿Cómo tomaste la noticia de que Tomás Boy volvía a ser el entrenador de Atlas?
Cuando me enteré que él iba a ser el entrenador, sentí que nuevamente se abría la puerta para mí en México y así fue. Él sabe lo que puedo dar con mi rendimiento y eso son puntos a mi favor, pues él me puso en Atlas la primera vez y nuevamente me está dando la oportunidad de continuar en el equipo y demostrar de lo que soy capaz.
¿Es una segunda oportunidad o la continuidad de un trabajo que estaba quedando a medias?
Vuelvo a Atlas a terminar un trabajo inconcluso. Creo que es la continuidad de algo que quedó a medias. Si bien al comienzo fue bueno, en el siguiente torneo fue malo. Pero me quedo tranquilo en el sentido de que pasaron tres entrenadores y con todos fui titular, aunque en las últimas fechas mis actuaciones no fueron de las mejores. Siempre me mantuve titular y, más allá de los obstáculos que siempre hay logré consolidarme en el equipo titular gracias al apoyo de mis compañeros.
¿Conocés el monto por el que Atlas adquirió tu ficha?
No, no lo sé, pero tengo que averiguar, ya que a mí me corresponde un porcentaje de esa negociación y por supuesto que tengo que estar al tanto de todo.
Si por el préstamo de un año fue $us 100.000, por tu ficha debe ser mucho más...
No lo sé, pero por el préstamo fue más. Los mexicanos pagaron primero por seis meses $us 50.000 y después tenían que pagar el mismo monto por otro semestre, pero como la dirigencia de Atlas se atrasó en hacer el depósito por otro medio año los de Blooming le pidieron más y ellos tuvieron que pagar calladitos.
¿Quién fue clave para cerrar las negociaciones?
Había una cláusula en el contrato y, como ellos querían que me quede, solo tuvieron que hacer uso de la opción que se vence el 31 de enero de 2014, aunque no voy a negar que los empresarios hicieron su papel.
¿Gana Blooming con este negocio, siendo que solo te quedaba seis meses de contrato?
Seguro que sí. El dinero les caerá bien para cubrir algunas de las deudas que tiene el club.
¿Con Boy puedes tener de nuevo un óptimo nivel?
Creo que sí, porque con él tuve un rendimiento regular y gracias a Dios los resultados se dieron tanto en lo personal como en lo colectivo. Con los otros técnicos también fui titular, pero las cosas para mí y para el equipo no fueron buenas. Tuvimos altibajos, sobre la hora nos ganaban o empataban los partidos; eso generó malestar y dudas en todos.
¿Cómo es tu relación con el técnico fuera de la cancha?
Es una persona cordial. Habla con todos, bromea, como cualquier ser humano atento y educado. Pero se transforma a la hora de las prácticas y en los partidos es muy temperamental. Lo vive mucho el fútbol y nos llama la atención a todos. Eso es parte del fútbol y, aunque suene irónico, ha sido el entrenador más temperamental que he tenido. Grita, reniega, pero siempre en el marco del respeto.
¿Creés que el equipo sintió la salida y que por eso no se hizo una buena campaña?
Yo creo que sí, con su salida el equipo vino de más a menos. No te niego que con los otros entrenadores hicimos buenos partidos, jugábamos bien, pero los resultados no se nos dieron y eso perjudicó la campaña. Esperemos que en este nuevo torneo que se inicia las cosas se den nuevamente como esperamos, ya que el equipo es casi el mismo y el entrenador es muy capaz.
En los años que llevas como futbolista profesional, ¿dónde creés que alcanzaste el pico más alto de tu carrera?
Si bien en todos los equipos procuro hacerlo bien, creo que en Universitario, cuando salimos campeones en 2008, y cuando regrese a Blooming (2009) han sido los mejores años de mi vida. Ahí conseguí todas las metas que me había trazado y ahora espero repetirlas en México.
¿Cómo arrancará Atlas el torneo Clausura?
Si bien estamos entre los de abajo en la tabla, la diferencia con el último es de ocho puntos y los demás están bien pegaditos, así que nosotros sacamos un buen margen, pero eso no quiere decir que estamos a salvo, todo lo contrario, hay que comenzar con pie derecho este nuevo campeonato.
Ojalá Dios quiera que podamos repetir la misma campaña que hicimos cuando recién llegué
EL PERFIL
Detalles de José Luis
Fecha de nacimiento 18-05-1986
Edad 27 años
Posición: volante mixto
Estatura: 1,73 metros
Año del debut: 2003
Club del debut: Blooming
Año que salió: 2012
Club del exterior: Atlas
Formación: Con 11 años llegó a la Academia Tahuichi, donde recibió la preparación inicial, sobresaliendo entre muchos que año tras año asisten en busca de ser catapultados al fútbol profesional.
Familia: José Luis está casado con Marión Montenegro y tiene un hijo de siete años, llamado Luis Andrés.
En la selección: En las dos últimas eliminatorias formó parte del seleccionado boliviano que jugó para ir a los mundiales de Sudáfrica 2010 y de Brasil 2014.
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