Villegas respondió así al cuestionario del # 1.
—¿Cómo califica el trabajo que desarrolla en el club Bolívar?
—Lo califico como un trabajo positivo porque se han dado pasos importantes en la estructura del fútbol formativo. Lo primero que se hizo fue un diagnóstico de lo que Bolívar tenía para realizar una planificación que permita mejorar las falencias y fortificar los aspectos positivos.
Se han creado cuatro escuelas de fútbol que trabajan con alrededor de 1.300 niños y se han establecido divisiones menores con trabajo especializado a partir de los nueve años brindando un trabajo de formación, que se aproxime en lo posible a los clubes de primer nivel. A nivel de pre-profesional se ha generado una cantidad de jugadores que habitualmente no se daba en el fútbol boliviano y el aporte de Bolívar al profesionalismo es significativo.
—¿Por qué decidió dirigir las divisiones menores de Bolívar y abandonar el trabajo con las inferiores de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF)?
—Porque el trabajo que me ofrecía Bolívar era un proyecto serio y con todas las condiciones adecuadas para proyectar un modelo de formación que es muy difícil realizar en la FBF, porque existen limitaciones económicas que impiden realizar un trabajo continuo y con aspiraciones serias.
—¿Hace cuánto que dirige Bolívar y cómo llegó a esa entidad?
—Dirijo Bolívar desde enero de 2010 y llegué por invitación de Guido Loayza .
—¿Considera que el trabajo que emprendió en Bolívar ya tuvo sus frutos, en qué proporción?
—Creo que los primeros frutos ya se están viendo a nivel profesional; sin embargo, no soy una persona conformista y creo que podemos brindar al fútbol boliviano nuevas generaciones de futbolistas que permitan ver con optimismo el futuro del Club y del balompié nacional.
—¿Cuántos futbolistas emergieron de la cantera del club Bolívar teniendo a Óscar Villegas como entrenador?
—Hemos aportado al Fútbol Profesional Boliviano con 24 jugadores y estamos hablando de aquellos que debutaron en el fútbol profesional boliviano, y en su mayoría continúan en actividad profesional.
—¿Cuál es la base del trabajo que realiza como formador de talentos?
—El trabajo diario, que debe ser planificado y ejecutado con el mayor profesionalismo posible, el ser exigente todos los días, pero, a la vez, educar y corregir todo el tiempo, porque nosotros creemos que el entrenador dejó de ser un simple formador de deportistas para convertirse en entrenador-educador, porque estamos convencidos que se debe realizar una formación integral con los niños y jóvenes, que no sólo nos permita tener mejores jugadores, sino también buenos ciudadanos.
—¿Cómo “recluta” a los futbolistas?
—Tenemos varias formas de realizar el reclutamiento de jugadores, pero la principal es la asistencia a cuanto torneo de menores exista en el país, y no hablo sólo de los certámenes oficiales que organiza la FBF, sino también de los regionales o departamentales que nos permita observar nuevos valores que consideramos que tienen potencial para poder integrarse al trabajo que realizamos en Bolívar y tenemos previsto implementar próximamente una red de buscadores de talentos en todo el país.
—¿Usted está de acuerdo con ese adagio que dice “nadie es profeta en su tierra, por qué?
—Hasta el momento, he recibido el apoyo de quienes han confiado en mi persona y hemos podido desarrollar el trabajo de la mejor manera posible; sin embargo, me gustaría, en un futuro, salir a trabajar al exterior del país para demostrar que estoy capacitado para trabajar en cualquier nivel.
—¿Los frutos que recoge hoy derivan de los conocimientos que acumuló cuando hizo seguimiento a un club en el exterior?
—Sin lugar a dudas, el conocer de cerca la realidad que se vive en otros países ha sido importante para buscar una metodología propia del fútbol boliviano, porque si bien los clubes que tuve oportunidad de visitar trabajan de una manera muy profesional, no todo es aplicable a nuestra realidad, nosotros debemos adecuarnos a las características propias de nuestros jugadores y buscar un modelo de formación boliviano que nos permita optimizar el trabajo que realizamos para conseguir los resultados que buscamos.
—¿Ha pensado volver a dirigir a un club profesional?
—He tenido varias ofertas para dirigir en Primera División, sin embargo, estoy contento en Bolívar y, hoy por hoy, me siento feliz con el trabajo que realizo; considero que estamos aportando al fútbol boliviano desde la parte más sensible, que es la formación de nuevos jugadores.
—¿Considera que los jóvenes futbolistas son relegados en el fútbol boliviano, por qué?
—Creo que los jugadores jóvenes merecen una oportunidad en el fútbol boliviano, lamentablemente se ha dejado sin efecto la norma del Sub-20 y esto ha quitado espacio a muchos jóvenes que podrían haber tenido la oportunidad de mostrarse en el fútbol competitivo y en un fútbol donde no existe competencia seria en las divisiones infanto- juveniles, es difícil que aparezcan nuevas figuras si no tienen el espacio necesario.
—¿La actual estructura del balompié boliviano perjudica a la formación de valores en el fútbol nacional?
—Perjudica el hecho de no tener torneos de menores de larga duración, la competencia es una parte importante de la formación, pero para ello se debe realizar inversión, no sólo en el trabajo, también en la organización de campeonatos que nos permitan mejorar el desarrollo de nuestros jóvenes y la necesidad imperiosa de jugar en estadios adecuados con gente, tanto de local como visitante, es por ello que Bolívar ha tenido que buscar competencia en el exterior, para cerrar la brecha que existe en nuestro país por la falta de torneos.
—¿Cuál es el trabajo que se debe desarrollar con los niños y jóvenes que practican el fútbol?
—Un trabajo planificado, serio y coherente, adecuado a cada edad con los contenidos físicos, técnicos y tácticos de acuerdo a su desarrollo y crecimiento, con profesionales idóneos y permanentemente capacitados para no incurrir en errores que puedan dañar a los niños en su formación.
Al mismo tiempo y aunque suene reiterativo, generar competencia exigente para que la formación tenga su punto de evaluación de manera permanente.
—¿Cómo cree que le irá a la Selección Nacional Sub-15 en el torneo Sudamericano?
—Como todo boliviano deseo que le vaya bien a la Sub-15; sin embargo, y por la experiencia en el trabajo de selecciones, es difícil competir con selecciones que llevan un proceso de más de dos años con muchos partidos internacionales jugados. Creo que la palabra más importante es Planificación y este tema es el que no lo tenemos desarrollado en nuestro país.
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