Emocionado por el tremendo desempeño de ayer, Romel Quiñónez no encontró palabras para reflejar su emoción.
Eso sí, se acordó de su San José de Chiquitos natal para enviar un saludo a su familia y todos sus seres queridos.
Quiñónez estuvo feliz por su soberbia actuación, que llegaron a destacar diferentes medios internacionales.
“No tengo palabras para expresar lo que siento, simplemente agradecer a Dios y a todos los compañeros que pusieron alma, vida y corazón para sacar este resultado”, dijo el golero nacional, la gran figura del encuentro.
Quiñónez también reconoció que el segundo gol que le anotaron fue culpa suya, pero “gracias a Dios que estuvimos iluminados esta noche y pudimos ganar un partido que fue muy complicado”.
A la hora del balance, el joven golero celeste, dijo que una de las claves fue el primer tiempo, “donde se pudo sacar la ventaja, el resultado lo dice todo”.
El golero indicó que otra de las claves del partido fue que Bolivia supo mostrar una gran actitud, porque por encima de todas las cosas, se demostró que hay un plantel que quiere hacer las cosas de la mejor manera.
“Lo dije, pusimos alma, vida y corazón para sacar un buen resultado, ganar luego de tanto tiempo un partido de Copa América es gratificante para nosotros”, señaló el golero.
Si bien aún no se rebasó de fase, pero está el camino como para lograr algo que no se había conseguido en otras incursiones nacionales.
“Es un paso muy importante el que hemos dado, estamos todos contentos”, dijo el guardameta que no se cansó de reiterar su saludo a la tierra que lo vio nacer. Luego, se salió en medio de la algarabía nacional en el Elías Figueroa.
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