También fue titular en la Selección Nacional en varios partidos bajo el mando técnico de Erwin Sánchez; sin poder jugar en Bolivia por lo menos hasta medio año, apunta al exterior.
Debutó en 2001 en Wilstermann, sus otros equipos fueron Blooming y Oriente Petrolero. Emigró en 2006 y su estadía en Europa se prolongó hasta 2007.
¿Cuál es tu presente futbolístico?
Estoy a la espera de una respuesta de afuera. Sé que aquí, en el país, no puedo jugar porque se cerró el libro de pases.
¿Hubo contactos con clubes del país?
En realidad tuve acercamientos, hablé mucho, pero mi meta es jugar en el exterior, quiero volver a salir. Confío en que en esta semana se pueda definir.
¿Se puede conocer el club que está interesado en tus servicios o de qué país es?
Eso lo maneja mi representante (Daniel González), él se encarga de mis cosas. Sólo espero definiciones.
¿Qué piensas del momento?
La verdad es que me tiene fatigado, sobre todo por el tema de los tiempos que se acortan. La Selección es lo que me interesa, claro que es un objetivo de todos. Es un lindo desafío; además, considero que futbolísticamente me encuentro maduro en este tiempo, pero sin jugar.
¿Pudiste hablar con el técnico Gustavo Quinteros?
No, para nada. Pero a mi favor está que lo conozco muy bien, estuvimos varios años juntos en la Liga. Sé lo que piensa en cuanto a propuesta de fútbol. Pero antes que eso, en mi mente está presente que para llegar a la Selección hay que estar en buen nivel, uno encuentra ritmo jugando, destacando en su equipo, aquí o en el exterior. Sólo me queda esperar, ojalá que hasta el fin de semana pueda haber novedades.
Thiago no se descuida, jugó en el Tigre de Coripata
Thiago Leitao llegó al país en 2003. Fue Wilstermann el club que lo trajo desde Brasil. Ese año comenzó una carrera futbolística en la Liga que lo llevó a jugar también en Oriente Petrolero, Bolívar y The Strongest, donde estuvo el año pasado.
Cuenta que por problemas familiares que tuvo en Brasil descuidó la tarea futbolística. Viajó dos veces a su tierra natal y eso fue un perjuicio. “No era bueno para mí y para mi posible equipo ir y volver sólo para jugar. Eso me quitó la concentración, entonces decidí parar hasta arreglar todo”.
Reside en La Paz y piensa dedicarse a la venta de ropa deportiva, no precisó detalles, pero dice que con un amigo suyo de Santa Cruz está en conversaciones para comenzar con la nueva actividad.
No ha descuidado la labor física, se entrena por su cuenta y dijo que dos veces fue a jugar hasta Coripata a pedido de un club. “Estuve en The Strongest de Coripata, eso me ayudó en algo a cuidar mi condición física. Reconozco que es malo no poder jugar, no poder compartir momentos felices y tristes en un vestuario con los compañeros, con los amigos”, señaló.
No tiene pensado moverse de la sede de Gobierno, está en compañía de su novia: “Aquí está mi familia”.
Según su versión, nunca estuvo parado por no quedar habilitado, no le pasó eso en Brasil, menos en Bolivia; sin embargo, confía en que a medio año su situación cambiará y que un equipo de Liga lo contactará para contar con sus servicios.
“Fue lindo recibir el cariño de la gente en Coripata, fui por gestión de una persona que me llamó y me preguntó si me interesaba, le dije que sí y estuve para jugar dos partidos. Se jugó a estadio lleno, una bonita experiencia”, señaló Leitao, quien sin embargo sostiene que lo suyo es el fútbol grande.
Jorge Asturizaga
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