“De Bolivia, el portero, fue en la segunda parte que tapó tres o cuatro ocasiones de gol. Si no había el portero esto terminaba cinco o seis a cero. Es difícil jugar contra Francia”, comentó Domenech que comandó a los “Bleus” en las copas del Mundo de 2006 y 2010 en Alemania y Sudáfrica respectivamente, tras llegar el banquillo en julio de 2004.
Respecto a la producción de la Verde, Domenech sostuvo que Bolivia no tuvo la posibilidad de llegar al gol.
“Bolivia trató de guardar la pelota, pero no tenía la posibilidad de marcar nunca, muy difícil. Es Francia y es un equipo difícil para jugar”, señaló.
Domenech fue al que le tocó dar algunos pasos para el recambio en la selección gala en 2006 cuando no llamó a Ludovic Giuly y relegó al banco de suplentes a David Trezeguet en Alemania, donde Francia quedó subcampeona al perder con Italia la final por la vía de los penales y sufrir la recordada expulsión de Zidane, por un cabezazo a un rival italiano.
En 2010 volvió a sorprender al no citar al delantero Karim Benzema y al mediocampista Samir Nasri.
“Para que los jóvenes jueguen en el equipo deben tener algunos con experiencia. El nivel internacional exige que los jóvenes jueguen en grandes clubes, sin son en pequeños no podrán ser grandes jugadores”, aseguró.
Finalmente, Domenech lanzó un mensaje a los jugadores: “El fútbol no se acaba nunca. Jóvenes y viejos deben dar los mejor siempre, salir del campo diciéndose ‘he hecho lo mejor que pude hacer’”.
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